Modelo de análisis TM4i: Módelo de análisis para gestión de la tecnología
Las empresas que "venden" tecnología atesoran un gran patrimonio tecnológico que, correctamente gestionado y desarrollado, les permitiría ganar competitividad en los actuales y futuros mercados globales.
Conscientes de la necesidad de introducir la gestión de tecnologías entre los fabricantes de maquinaria, Anmopyc buscó la colaboración del ITA para desarrollar y realizar la implementación metodológica de un modelo de análisis a la medida de las empresas fabricantes de la asociación: TM4i, Technology managment for innovation.
La tecnología es uno de los activos más valiosos de los fabricantes de maquinaria, sin embargo, en muchas empresas no se gestiona como tal; habitualmente, queda fuera de la reflexión estratégica interna. Una gestión eficiente de las tecnologías es un acelerador de la innovación, ya que, entre otras ventajas competitivas, permite enfocar los recursos tecnológicos hacia innovaciones de mayor valor añadido.
Precisamente, uno de los principales obstáculos que encuentran las empresas para diseñar una estrategia tecnológica reside en identificar su patrimonio tecnológico, no siendo plenamente conscientes de que el valor de los productos que venden nace del conocimiento que tienen de una o varias tecnologías, ya sea a través de una máquina particular, una persona cualificada o una patente. Para ello, es deseable que tengan su inventario de tecnologías desarrollado y documentado, identificando las tecnologías clave para el desarrollo de su actividad.
La metodología del modeloTM4 tiene en cuenta que en la definición de la estrategia tecnológica deben participar las diferentes visiones de la empresa, pues a menudo las necesidades del departamento comercial chocan con las del departamento de ingeniería, por ejemplo. Hasta ahora, existían guías genéricas que no definían el proceso fase por fase, por eso Anmopyc y el ITA quisieron desarrollar un modelo operativo y a la medida de la pyme y de las circunstancias actuales de un entorno cambiante. La vigencia del plan tecnológico de una empresa no pasa hoy de dos años, por lo que el proceso debe ser ágil y vivo, revisable periódicamente. El modelo TM4i está pensado para implantarse en menos de dos meses.
El modelo TM4i ya ha sido probado en dos empresas: Enarco, fabricante de vibradores de hormigón y compactadoras; y Tabe, que fabrica y distribuye maquinaria para construcción, demolición y reciclaje. En ambas pruebas piloto se ha destacado positivamente la utilidad de las cuatro sesiones de trabajo que define la metodología, en las que el equipo reflexiona y consensua las decisiones que marcarán su estrategia tecnológica. En ambas empresas se tenía muy claro que, igual que se tiene un plan comercial, financiero o de márquetin, se tiene que tener un plan tecnológico para conseguir sus objetivos estratégicos. Implantar este proceso les ha permitido generar su inventario tecnológico, identificar las tecnologías clave que tienen que desarrollar para tener éxito y determinar nuevas necesidades tecnológicas antes de que sea tarde. El modelo permite dar respuestas a preguntas como las siguientes: ¿qué tecnologías tengo?, ¿cuáles domino?, ¿existen otras similares con la misma función?, ¿cuáles me diferencian de mis competidores? El resultado del proceso se recoge en un plan tecnológico, el cual recoge la estrategia tecnológica de la empresa y marca una serie de acciones, responsables e indicadores de seguimiento para poder desarrollar esa estrategia en el horizonte temporal planteado.
Taim Weser acaba de embarcarse en este proceso, ante la creencia de que el modelo es sencillo y con una metodología coherente y objetiva, y con la expectativa de que le permita identificar las tecnologías clave para la empresa para determinar de una manera objetiva donde concentrar los esfuerzos y aprovechar al máximo los recursos disponibles.
El siguiente paso será desarrollar un software que facilite aún más la implantación, seguimiento y evaluación de las decisiones adoptadas: proyectos de I+D, compra de equipos y licencias, formación de personal. Además, si muchas empresas del sector definen adecuadamente su estrategia, el sector podrá beneficiarse de información común sobre madurez de determinada tecnología, acceso a equipos, patentes, vigilancia y prospectiva tecnológica.
Cualquier empresa del sector puede aplicar el modelo TM4i, y desde ANMOPYC os animamos a que reflexionéis sobre la necesidad de gestionar adecuadamente vuestro patrimonio tecnológico para asegurar vuestra competitividad en los mercados globales.
Para más información podéis contactar con bbentura@anmopyc.es