ANMOPYC informa sobre la Base de Datos SCIP
ANMOPYC organizó un webinario en colaboración con CECE y ECHA para dar a conocer las obligaciones relativas a la notificación a la Base de Datos SCIP
El pasado 16 de
junio, ANMOPYC organizó un webinario para dar a conocer las obligaciones de
fabricantes, importadores y distribuidores relativas a la base de datos SCIP
sobre sustancias químicas peligrosas presentes en los productos. Para este webinario
contamos con la participación de Belen Bravo, Directora de Políticas Técnicas
Medioambientales de CECE (Comité Europeo de Equipamiento para Construcción) y de
Clara Rueda, Regulatory Officer de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas
Químicas (ECHA).
La SCIP es una
base de datos creada por la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas
(ECHA) en virtud de la Directiva (UE) 2018/851 (por la que se modifica la
Directiva 2008/98/CE sobre los residuos), que contiene información sobre
sustancias preocupantes presentes en artículos o en objetos complejos
(productos). El objetivo de esta base de datos es permitir a los consumidores
tomar decisiones de compra más informadas y ayudar a los operadores de residuos
a desarrollar aún más la reutilización de artículos y el reciclaje de
materiales.
De acuerdo con
dicha normativa, desde el 5 de enero de 2021, todo proveedor de un artículo que
contenga una sustancia extremadamente preocupante (SEP) de la lista de
sustancias candidatas extremadamente preocupantes en una concentración superior
al 0,1 % en peso/peso (p/p) en el mercado de la Unión Europea tiene que
presentar la información sobre dicho artículo a la base de datos.
Durante el
webinario, Clara expuso que es la base de datos SCIP (como fue creada, quien
debe notificar, que productos están afectados, …), explicó las herramientas que
hay disponibles para poder preparar y presentar notificaciones y como se puede
visualizar la información notificada.
Por su parte,
Belén Bravo comentó el contexto en el que se creó la base de datos SCIP,
la relación con otros reglamentos productos químicos como por ejemplo el REACH
y la experiencia de otros fabricantes que ya están introduciendo información en
la BBDD.